Niño

Los 55 meses de tu hijo:

Los primeros encuentros con amigos

Los primeros encuentros con amigos

Alrededor de los 4 o 5 años, los chicos empiezan a hacer programas con sus amigos del jardín de infantes. El manejo adecuado de este tiempo extra es muy importante.

Los primeros encuentros con amigos

Cualquier posibilidad de ‘salir al mundo’, siempre y cuando sea en una situación cuidada y bajo supervisión adulta, es riquísima. Ir a las casas de amigos les permite a los chicos experimentar, desde temprano, vivencias y sensaciones que atravesarán siempre a lo largo de la vida: pelearse, amigarse, defenderse, compartir...”, señala la psicóloga María José Correa.

Socializar por fuera del ámbito familiar y escolar es, entonces, una manera de empezar a compartir nuevos momentos junto a pares. “Ahora, es importante no forzarlos a hacer algo que no quieren. Si todavía no están listos para incursionar en programas con amigos, no hay que obligarlos. Ya les llegará el momento”, aclara la especialista.

Además, también es fundamental manejar los tiempos y los momentos para esos programas extra escolares. Algunos consejos:

  • No es bueno excederse con la cantidad de programas semanales. Una o dos visitas a casas de amigos por semana es lo óptimo. Más puede resultar cansador y alterarles la rutina o el sueño.
  • Conviene que, tanto el hijo como los padres, conozcan a los adultos que estarán a cargo de los chicos durante el encuentro. Los padres tienen que quedarse tranquilos de que su hijo estará bien cuidado. El chico, por su parte, tiene que sentirse cómodo con la gente y el lugar que visitará.
  • A esta edad, los encuentros deberían durar 2 o 3 horas como máximo. Un lapso más prolongado puede resultar cansador y dar lugar a peleas innecesarias.
  • A veces, es mejor empezar invitando a casa para que los chicos se familiaricen con la nueva dinámica en su propio terreno.

El respeto por el tiempo interno de cada chico se debe tener en cuenta, sobre todo, cuando aparecen las primeras posibilidades de quedarse a dormir en casas de amigos. Si tanto los padres como el hijo se sienten cómodos y seguros con la idea de que pase la noche fuera de su casa, bienvenido sea. Si, en cambio, la situación es angustiante y no resulta placentera, es mejor postergarla. “Hoy en día, muchos adultos les exigen a sus hijos que hagan cosas de chicos más grandes. Que un chico de 4 o 5 años extrañe cuando se queda a dormir en una casa ajena es absolutamente normal. Lo importante, entonces, es estar atento a esa angustia y ofrecerle contención”, explica Correa.

Es bueno tomar las siguientes precauciones antes de organizar los primeros programas con noche incluida: 

  • Empezar por las casas de primos u otros familiares, en las que tanto los chicos como los padres se sienten cómodos y en confianza. 
  • Asegurarles que, en cualquier momento, pueden arrepentirse si quieren y llamar a su casa para que los padres los pasen a buscar. Saber que cuentan con esta opción les dará tranquilidad. 
  • Explicarles los detalles del programa, desde en qué ambiente van a dormir hasta la hora en que los padres los pasarán a buscar al día siguiente.
  • Llamarlos alrededor de la hora de acostarse para que se sientan acompañados y cuidados. Si los padres consideran que esto puede angustiarlos, es mejor que los chicos decidan si quieren recibir o no el llamado.

Si se maneja la situación con cautela, el programa va a resultar tan divertido para los chicos que van a querer repetirlo todos los fines de semana.

Nota supervisada por el Equipo Médico de Mamashelp.

cargando

cargando comentarios